Tal vez pienses que los personajes de tus historias tienen que ser únicamente seres humanos para considerarse personajes, más esto no es del todo cierto. Ahora veremos con más detalle las diferentes naturalezas de los personajes literarios.
Puedes clasificar las características (atributos y cualidades) de tus personajes en las siguientes modalidades: prosopografía, caracterismo, patopeya, etopeya y genealogía. A continuación, explicaré cada una de ellas…
El tiempo y espacio narrativo, ¿afecta a mis personajes? ¿Pasa algo si mi personaje es rey y viste ropas medievales? No, pero ¿Y si vive en New York, en siglo XXI? Ahí la cosa cambia…